Como ya sabes, podemos expresar la cantidad con la palabra mucho, pero se trata de una palabra con unas formas especiales. Si acompaña a un sustantivo, cambia de género y número (y toma los del sustantivo): Marcos trabaja muchas horas porque tiene muchos hijos y necesita el dinero. Si acompaña a un verbo, es decir, no aparece un sustantivo, entonces es invariable, no cambia: Elena y su marido trabajan mucho. Finalmente, si acompaña a un adjetivo o un adverbio, no usamos mucho, sino muy: Elena es muy trabajadora / Trabaja muy lejos de su casa.
También usamos muy cuando expresamos la cantidad de un adverbio, como has visto en el caso de los adverbios de lugar (muy lejos, muy cerca) o de tiempo (muy pronto, muy tarde) y que a continuación vamos a ver en los adverbios de modo (muy bien, muy mal).